Cada paso es una huella,
en mi corazón una historia,
un recuerdo en la mente,
en mis ojos una lágrima.
Y, en mi boca risas y besos,
en la piel el fuego de tus caricias.
Masculló los recuerdos,
esos que me dan vida,
vuelvo al silencio y te pienso
y en mi mente afloras
fragante y esplendoroso,
has dejado huellas en mi,
no quise seguir tus pasos,
me ganó la cobardía y,
quién soy yo para ir detrás de ti,
si mi camino no tenía la misma dirección,
si mientras yo caminaba,
tu corrías,
las sendas son amplias,
estuvimos juntos un día,
muchos días…
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